Ángela llegó unos meses después que nosotras.
Como era nueva, estaba asustada y triste.
Las chicas y yo junto con la seño, nos pusimos a trabajar para que se sintiera mejor.
La seño la cogía en brazos y le daba besitos y nosotras jugábamos con ella y compartíamos juguetes.
En poco tiempo estaba a gusto y contenta.