Había una vez un caracol que vivía en un huerto.
Siempre estaba triste porque se reían de él por tener una vieja casa, y se escondía para que no lo viera nadie.
Cuando más triste estaba llegó un caracol más viejo y le pregunto que qué le pasaba, el caracol le dijo que todos se reían de él.
El caracol viejo le dijo que no les hiciera caso a nadie que cada uno tiene su casa, y el caracol desde ese día fue el caracol más feliz del huerto
FIN
