Érase una vez un castillo donde vivía un caballo llamado Messi y tenía un cuidador que lo peinaba, le daba de comer y lo sacaba de paseo y ese día en el bosque había un lobo y lo quería matar al caballo y le preguntó el lobo cómo se llamaba.
Me llamo Messi y se hicieron amigos y no lo mato.
FIN